Skip to content

¿En qué puedo echarte una mano?

Cada persona construimos nuestra forma particular de ver el mundo, en gran medida sin darnos cuenta de ese proceso. Aunque con frecuencia se nos presiona para creer que hay formas correctas e incorrectas de mirar, para un buen terapeuta no es así. Todo lo que nos pasa cumple una función, quiere decirnos algo. Lo que sí diferencia un terapeuta es en qué medida tu enfoque de la situación o la manera en la que respondes a ella te está ayudando o te está perjudicando. Y siempre hay una alternativa. La magia de la terapia es que, de repente, uno cae en la cuenta de ello.
hacer-terapia.ilustracion-edit
hacer-terapia-problemas

Problemas habituales

Me gustaría mencionarte algunos de los problemas más comunes por los que suele acudir alguien a consulta. Sin embargo, hay muchas más posibilidades, tantas como personas. Lo importante es que, si hay algo que te produce malestar o te inquieta, no des por hecho que la vida es así, o que no puede hacerse nada al respecto, o que es un asunto personal y, por tanto, debes afrontarlo en soledad o implicando a amigos y familiares que quizá tampoco sepan cómo abordarlo. A veces, el simple hecho de contarme qué te está pasando ayuda, porque al no estar yo implicado en tu vida puedes expresarte conmigo con total libertad y dedicarte un tiempo para salir de tu cotidianeidad y pararte en lo importante.

            —Problemas en las relaciones sociales, de pareja o familiares: no te sientes a gusto entre la gente de tu entorno (amigos, compañeros de trabajo o estudios…) o piensas que no conectas; crees que no tienes suerte, no se te dan bien o no te satisfacen las relaciones de pareja o sexuales, discutes demasiado con tu pareja; la relación con tus hijos no funciona como te gustaría, o quizá sea con tus padres…

            —Miedos limitantes, estrés, ansiedad: hay cosas que no te puedes quitar de la cabeza, que no te dejan dormir, trabajar, que te aíslan de los demás o te impiden abordar determinados retos o adquirir ciertas responsabilidades; sientes que hay situaciones que te dominan o ante las que te bloqueas; te notas intranquilo, como si algo malo fuera a pasar…  

            —Problemas de autocontrol: haces cosas que perjudican tu bienestar o el de los demás, pero no consigues dejar de hacerlas, como causar daño a otras personas, consumir alcohol o drogas en exceso, pasar demasiadas horas frente al ordenador, la televisión o los móviles, apostar demasiado, comprar sin medida, darte atracones, etc.; quizá no te reconozcas en lo que haces, piensas o sientes…

            —Tristeza o vacío: te sientes triste, insatisfecho, sin ganas; nada te llena, en cuanto te despiertas el día se te hace cuesta arriba; has perdido a alguien importante, o ha ocurrido un accidente o un hecho que lo ha cambiado todo; has perdido la esperanza de ser feliz; sientes un bloqueo para hacer las cosas; te molesta la gente, o estás enfadado con el mundo…

            —Estás preocupado por otra persona.

hacer-terapia-que-encontrar

¿Qué me voy a encontrar al iniciar una terapia?

—Las primeras sesiones son de evaluación. ¿Qué significa esto? Es simplemente que comentes qué te trae a terapia y algunas cosas de tu vida (familia, amigos, pareja, intereses…). Se trata de que yo pueda saber qué te preocupa y quién eres. Eso sí, jamás se te va a forzar a hablar. Dirás lo que tú quieras, cuando quieras y como quieras. Si de algo no quieres hablar, no tienes por qué hacerlo. Este es un espacio para que tú te sientas en total confianza, y nunca intimidado/a o presionado/a. Todo lo que se comente y se trabaje será por mutuo acuerdo.

—Todo lo que se habla en terapia es confidencial. Y debes saber que la ley te respalda en este aspecto, conmigo y con cualquier otro terapeuta. Así que, en ese sentido, nada saldrá más allá de la sala de terapia. Solo hay algunos supuestos en los que se rompería la confidencialidad, y son los siguientes: que se esté atentando o se vaya a atentar contra la integridad de una persona (que se esté produciendo o se vaya a producir abuso sexual o físico o intención de agredir o matar a alguien), que el paciente vaya a atentar contra su propia vida o que un juez me solicite un informe para un proceso judicial.

Yo también he sido paciente. Por eso, sé que lo normal es que impresione dar el paso de contactar con un terapeuta. Pero basta con que recuerdes que mi trabajo es, precisamente, que te sientas cómodo. Desde aquí, te envío un abrazo.

Tarifas

  • Sesiones individuales
    50 €
  • Sesiones en pareja
    60 €
    No trabajo con bonos porque considero que un paciente debe tener la libertad de venir a terapia o dejar de venir cuando quiera, sin la presión de tener que consumir un bono de 5 o 10 sesiones

Citas